martes, 22 de enero de 2008

Oración de andar por casa

PARA REZAR EN CASO DE ENCONTRARSE EN EL "HOYO" COTIDIANO:
(VÉASE PROBLEMAS EN EL TRABAJO, MALENTENDIDOS CON AMIGOS... SIRVE PARA LAS PEQUEÑAS TONTERÍAS QUE NOS AMARGAN LA VIDA. PARA LAS COSAS GORDAS, MEJOR ACUDIR A LOS SANTOS).

Querida Madre mía del cielo:
Ya me conoces, aquí estoy de nuevo,
sintiendo que vuelvo al atolladero de siempre,
aquél en el que parece que me encuentro,
cada vez que acudo a ti.
Querida Madre mía del cielo,
me acuerdo de esa oración que dice
que no se conoce el caso
de nadie que, habiendo acudido a ti
tú no le hayas ayudado.
¿Por qué, Madre mía, daré tantas vueltas
antes de llegar a ti?
Pues sí, vengo a ti empequeñecida,
triste y algo derrumbada...
por esos fantasmas que vienen cada poco,
por todo aquello que no hago bien,
porque no controlo mi egoísmo,
ni mi envidia, ni mi avaricia.
Vengo hecha una niña pequeña,
pero ni me averguenzo, ni tengo miedo,
a tu lado, lo cierto es, Madre mía, que nunca tengo miedo.
Ni verguenza. Qué verguenza voy a tener
si has visto de lo que soy capaz
y aún así me has dado tanto amor.
Ayúdame, Madre mía,
quédate a mi lado, sólo déjame ver
un piquito de eso que llaman
tu amor maternal.
Sólo con que me dejes sentirte,
una milésima, unos segundos...
yo sé que volveré a levantarme.
Porque ya tengo esa experiencia,
sé que nunca me dejarás sola.
Te quiero, Madre mía.

No hay comentarios: