miércoles, 14 de julio de 2010

Moratinos se apunta a un bombardeo

Acabo de escuchar un fragmento de la entrevista que le han hecho, en Onda Cero, a José Antonio Alonso, portavoz del PSOE, esta misma mañana.
Hablaban sobre la "excarcelación" en Cuba de varios presos políticos, y del papel que España está jugando en este proceso, como país de acogida para los mismos (porque en Cuba, no se olvide, no pueden estar). Tal y como lo exponía este señor, sin un solo quebranto de su voz, y con la cara más dura que he visto en mucho tiempo, parecía proclamar a Moratinos como candidato a Premio Nobel de la Paz, como si toda la gestión hubiera sido realizada por nuestro Ministerio de Exteriores. A medida que iba escuchando la entrevista, sentía que la sangre se me recalentaba hasta el punto de ebullición, y me acordé de San Pantaleón y su sangre licuada todos los años.
Al finalizar la entrevista, uno de los contertulios (que bien podía haber pedido un turno de preguntas para dejárselo muy claro al insigne ex Ministro de Justicia), apuntó, con exactitud, que Moratinos tan sólo se ha subido a carro de las gestiones que desde años lleva realizando la Iglesia en Cuba. Bien dicho. Así es. Y que este gobierno se apunte el tanto me hace sentir como el Etna a punto de estallar, porque, sin ser ninguna experta (ya me gustaría), en Cuba y en los presos de conciencia, he tenido el privilegio de hablar con disidentes que continúan viviendo en la isla como Oswaldo Payá, Presidente, a la sazón, del Movimiento Cristiano de Liberación, como Dagoberto Valdés, durante muchos años miembro del Pontificio Consejo Justicia y Paz, o con la mujer de Oscar Elías Biscet, que visitó España no hace mucho y ahora está en Cuba.
Todos ellos han recibido y reciben el apoyo de la Iglesia durante sus largos años de luchas y sufrimientos; y cuando me refiero a la Iglesia , no me refiero al arzobispo de la Habana, monseñor Jaime Ortega, (que por supuesto), sino también a Roma, y creo obligatorio recordar la visita que hizo Juan Pablo II, que tanta esperanza llevó a la isla, y a tantas otras visitas, quizá menos nombradas, como la de Tarcisio Bertone, el año pasado.
La Iglesia ha respetado los tiempos. Ha trabajado calladamente, a veces ha sido acusada de connivencia con el gobierno cubano, pero creo que sería mejor llamarlo prudencia. Y los frutos vienen dándose desde hace años, y quizá éste sea (quizá, no pondría la mano en el fuego), el principio del fin.
En todo caso, me empaparé de los periódicos y como observe más declaraciones de este tipo "vive Dios" que escribiré hasta al mismísimo Rosario de la Aurora para luchar contra esta mentira y esta falta de reconocimiento. Pero claro, los sacerdotes pederastas venden más.
Por cierto... ¿cómo "presos políticos"? ¿No eran delincuentes comunes, como afirmaron el actor Willy Toledo y Lula da Silva?
Si son delincuentes comunes, ¿cómo España les presta cobijo?
Es indignante.

1 comentario:

Almudena dijo...

Pero mujer... no esperes a que te hierva la sangre para escribir un artículo clarito. Si tienes las cosas claras y puedes, casi diría que debes hacerlo. Ya publicaste en tu blog, cuando lo de Willy Toledo, una entrada sobre el tema que a mí, que soy bastante ignorante en ésto, me sirvió de mucho.