Dicen que a las primerizas nos cuesta más enterarnos. Y que hay diferentes maneras de sentirlo.
Al parecer, un bebé en la barriga puede sentirse como si se tuvieran mariposas ahí dentro; como si tuvieras un montón de gases burbujeantes... o como las olas del mar.
Aún es muy pronto para mí... pero juraría que ya lo he sentido. Y en mi caso es como las olas del mar.
Creo que nunca lo olvidaré. Estaba tumbada, leyendo... y tenía un cojín en la barriga. El libro, encima del cojín. De repente, una sensación muy suave. Sentía pequeñas olas dentro de mí. Era agradable y extraño al mismo tiempo.
Nací en una ciudad con mar, y me crié en otra ciudad, también con mar. Entiendo que mi bebé es de costa también, aunque se empeñe en nacer en Madrid. Qué lástima.
2 comentarios:
Disfruta cada momento, es irrepetible. A mí, uno de mis hijos me tiró una madeja de lana que tenía encima de la barriga de una patada. Ahora es todo tuyo.
Enhorabuena por ese regalo que tienes en el vientre. Cuídalo mucho.
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